Tal vez fuera hija del humo.
Tal vez fuera ella quien tejía de noche, en secreto, las redes con las que la tierra apresaba los rayos del sol.
Tal vez fuera ella la que miraba sus sueños y los teñía de algo parecido a la felicidad.
Tal vez fuera ella la que navegaba junto a la delgada luna en su cielo particular.
Tal vez fue ella la que encendió el fuego en su boca.
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